PERÚ, Dic 13 (FILAC) –En la Amazonia peruana, un grupo de niños, niñas, jóvenes y adolescentes del Pueblo Indígena Ticuna trabajan en la preservación de su lengua materna, identidad y cultura. Con cámaras en manos y nutridos por las historias y narraciones transmitidas por sus abuelas y abuelos, han producido contenidos audiovisuales para resguardar los saberes de su comunidad.
La iniciativa “Ojos del Monte: Revitalización de la lengua y la cultura Ticuna», ha sido impulsada por un grupo comunitario de jóvenes quienes trabajan para la recuperación de la lengua Ticuna utilizando la comunicación audiovisual.
Su labor abarca desde la recopilación de testimonios de sabios y sabias sobre los conocimientos de la lengua, cosmovisión y tradiciones ancestrales del pueblo Ticuna, hasta la creación de videos que abordan temas fundamentales sobre su identidad.
Además, han dado vida a una Red de Comunicadores y Guardianes de la lengua y cultura Ticuna.
La implementación de la iniciativa fue apoyada por el Fondo Qhapaq Ñan es impulsado por el Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de América Latina y el Caribe – (FILAC), junto a la Red de Jóvenes Indígenas, y es financiado por las Fundaciones Pawanka y Ford.
Lengua Ticuna se va perdiendo poco a poco
La lengua Ticuna, también conocida como tikuna o tukuna, refleja la identidad del Pueblo Indígena del mismo nombre y forma parte de la familia lingüística Ticuna. Su presencia se extiende por las cuencas de los ríos Amazonas, Mayoruna y Yaguas, en el departamento de Loreto, Perú y se escucha también en Brasil y Colombia.
Sin embargo, el avance de la globalización, la migración hacia las granes ciudades, el abandono histórico por parte del estado peruano y la falta de políticas públicas para impulsar el desarrollo de las comunidades amazónicas originaron la pérdida sistemática de esta lengua y la identidad cultural Ticuna.
Actualmente, en los territorios Ticuna, la lengua y la identidad cultural se pierden poco a poco debido a la falta de oportunidades, lo que provoca una migración significativa de los jóvenes Ticuna a países fronterizos como Colombia y Brasil, sumándose a ello la violencia que se ha formado por el conflicto con el narcotráfico, que están cada vez más cerca de los territorios ancestrales del pueblo Ticuna.
Datos oficiales del Ministerio de Cultura de Perú, indican que, en el año 2018, unas 4,290 personas aprendieron a hablar en la lengua ticuna.
La lengua ticuna cuenta con un alfabeto oficial de 22 grafías. Existen actualmente 47 escuelas de educación intercultural bilingüe registradas al 2018 en Perú.
Ante estas problemáticas que alejan a las nuevas generaciones de sus tradiciones y costumbres, se ha impulsado la revitalización de la lengua y la cultura Ticuna, formando a adolescentes, jóvenes y adultos Ticuna de las comunidades de Bufeococha, Cushillococha, San pedro de Palo Seco, y Yagua de Marichin, en la región Loreto, Perú.
Empoderando las voces juveniles para preservar la lengua Ticuna
La iniciativa tuvo la participación de 30 jóvenes y adolescentes de las comunidades mencionadas, se ha expandido incluso para involucrar a los niños, niñas y personas mayores. Desde julio, se han llevado a cabo reuniones y coordinaciones con adolescentes, jóvenes, profesores, dirigentes y líderes comunitarios para avanzar logísticamente en la realización de los talleres.
“La comunidad ha recibido bien el proyecto, siendo la primera iniciativa cultural que promueve la revitalización y el fortalecimiento de la cultura Ticuna a través de herramientas comunicacionales y audiovisuales. Hubo gran interés por parte de los jóvenes y de los niños en los talleres, quienes han expresado su deseo de participar.
A pesar de no estar inicialmente previsto, hemos decidido llevar a cabo un piloto para que también los niños y niñas de la comunidad puedan formar parte de este proyecto», señaló Patric Murayari Macro, coordinador administrativo de la iniciativa.
Las juventudes han pasado por una fase de capacitación exhaustiva en herramientas comunicativas. “La capacitación tuvo dos fases, la primera fue comprender el contexto sobre los medios de comunicación y el rol del comunicador comunitario en los territorios indígenas, un poco de la teoría de la comunicación comunitaria en torno a la academia y a los estereotipos en la sociedad sobre los medios de comunicación tradicionales que hay en Perú, añadió Murayari.
Asimismo, se han facilitado herramientas comunicacionales básicas del periodismo en tono a la investigación para que puedan concretar sus historias en torno la revitalización lingüística y cultural y han dedicado esfuerzos adicionales para capacitar a padres y madres enseñándoles a tomar fotografías y promocionar sus productos en redes sociales, haciendo frente a las dificultades que tiene con el acceso y uso de la conectividad.
«Hoy en día la comunicación se fundamenta en la tecnología, lo cual representa un desafío en muchas comunidades. Muchos de nuestros miembros no saben cómo manejar los dispositivos, desde encender y apagar equipos hasta capturar imágenes de calidad para promocionar sus productos. Algunas de estas comunidades son hábiles artesanos que desean dar a conocer su trabajo con fines comerciales. Además, las madres no saben cómo sacar fotos de sus trabajos para promocionar sus productos y eso les estamos enseñando”, compartió Lloyd Orlando, coordinador general de la iniciativa.